Con el ruego de su disculpa por los meses de inactividad de este blog -la cual obedece al exceso de ocupaciones que tuve en los últimos meses del año pasado hasta mediados de febrero del presente 2012, al que después vinieron las merecidas vacaciones de verano (austral)- comunico que regreso a mis estudios jurídico-heráldicos, comenzando por cumplir una deuda que tengo, ya mucho tiempo, con un distinguido lector español, que me consultó sobre el uso de unas armas de ascendencia no agnaticia, por lo que mi respuesta se fundará en las normas sucesorias y en las prácticas de la heráldica hispana, para después continuar con el estudio regular del Juicio de Armas.
Por todo lo anterior, ruego a cada uno de ustedes su comprensión por mi silencio en esta bitácora y vuestra paciencia, pues este viernes 15 les entregaré la próxima publicación con la precitada respuesta.
Asimismo, expreso una recomendación.
Juré que en mis vacaciones nada me molestaría, a excepción de un obsequio que me hice en Navidad: el "Libro de Armería" de la Orden Militar y Hospitalaria de San Lázaro de Jerusalén. Y así fue. Apenas me llamaron desde mi despacho en Santiago de Chile sobre la llegada del libro desde Madrid, suspendí por un día mi descanso anual, con el solo fin de retirarlo y volver, feliz, al solaz con el libro en mis manos.

En resumen, una obra que viene a rescatar la saludable costumbre de la antigua Ciencia Heroica, en que la noble tradición de los armoriales o rolls of arms se vigoriza con las técnicas contemporáneas de impresión y diseño informático, y a disposición de cualquiera que quiera iniciarse, o ya se ha iniciado, en el estudio de la heraldería. Envío, pues, mi sincera felicitación a la Orden de San Lázaro en general, y a los autores del Libro de Armería en particular, por esta distinguida obra, demostrando así que los caballeros de la Cruz de Sinople no sólo son celosos guardadores de las virtudes primigenias de la caballería del Medievo, sino que del rico acervo heráldico; ejemplo que bien podrían imitar las restantes órdenes ecuestres aún en vigor.
Por todo lo anterior es que recomiendo, encarecidamente, a mis estimados lectores -máxime a los habitantes de Latinoamérica- la adquisición del Libro de Armería, en cuanto texto de obligada consulta para todo miembro de la Comunidad Heráldica. Para su adquisición, pueden dirigir un mensaje a la casilla de correo electrónico de la Administración de la Cancillería del Gran Priorato de España (cancillergpe@hotmail.com), y serán contactados por la señorita Berta Pedemonte Vives, cuya gentileza y prontitud de respuesta a mis consultas, merece todo mi reconocimiento y gratitud.
Reciban todos y cada uno de mis estimados lectores mi más alta consideración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario